Evolución Programada
Capítulo 1: Vacío Interestelar
La Calypso surcaba el vacío interestelar con la majestuosidad de un coloso tecnológico. Diseñada para misiones militares de largo alcance, la astronave recordaba a un edificio terráqueo por su distribución en cuatro niveles interconectados. Su motor de Alcubierre era una obra maestra de la ingeniería humana, que permitía su propulsión a diez veces la velocidad de la luz, creando un campo de distorsión que plegaba el espacio a su alrededor.
El cuarto nivel, el más elevado de todos, era el núcleo de la vida diaria de la tripulación. Allí se encontraba el puente de mando, un espacio amplio y luminoso, dominado por hologramas tridimensionales y estaciones de control que proyectaban datos en tiempo real sobre la posición de la nave y su entorno. A pocos pasos, los dormitorios individuales de la tripulación ofrecían privacidad y descanso, mientras que las salas de esparcimiento, gimnasio y hasta una piscina daban espacio para combatir el tedio de las travesías.
Bajo este nivel, en el tercer piso, se hallaban los alojamientos criogénicos y las salas de mantenimiento. La joya tecnológica de este nivel era la sala de Criopreservación HighTech 601-S, un sofisticado sistema diseñado para garantizar la hibernación segura de la tripulación durante los largos periodos de inactividad. La larga sala albergaba treinta contenedores criogénicos o "pods", cada uno equipado con tecnología de soporte vital avanzada, vigilada constantemente por CIO-2, la inteligencia artificial que gobernaba la nave.
Los dos niveles inferiores servían como bodegas de carga y espacios operativos. En tiempos de guerra, podían transportar tropas, equipamiento militar y armas; pero en esta misión, albergaban herramientas de exploración geológica y sistemas de detección para minerales estratégicos. Entre los equipos destacados estaban la lanzadera espacial PolarDark, diseñada para aterrizajes complejos, que albergaba un land rover adaptado para terrenos hostiles, y cuatro vehículos EVA (Exploración y Actividad Extravehicular) con brazos articulados para trabajos fuera de la nave.
Por los pasillos y compartimientos de la Calypso se podían ver robots antropomorfos de aspecto neutral, que asistían a los humanos en diversas tareas auxiliares. Desperdigados a lo largo de la nave, encontrabas pequeños robots cilíndricos, con brazos articulados. Al mirarlos, daban la impresión de ser pequeños tambores en miniatura. Su misión era garantizar el mantenimiento general y la limpieza de la nave.
Todo este ecosistema estaba supervisado por CIO-2 (Cibernetic Intelligence Outflow 2), la IA que controlaba y optimizaba cada función crítica de la Calypso. Cuando la tripulación dormía en hibernación, CIO-2 se encargaba de comandar la nave. Su presencia era ubicua y eficiente, una entidad incansable que monitoreaba cada variable del viaje, desde la presión atmosférica en las bodegas hasta las fluctuaciones de la radiación que envolvía a la nave.
La misión de la Calypso era una ambiciosa expedición al bulbo de la galaxia Vía Láctea, una región densa en estrellas poco estudiada debido a su lejanía y complejidad. Los objetivos principales de la tripulación eran investigar a los planetas OGLE-2018-BLG-0677Lb y MOA-2011-BLG-293Lb, ambos descubiertos mediante microlente gravitacional y considerados candidatos para albergar lunas habitables o con condiciones propicias para la vida.
Desde el lado científico, la misión buscaba responder preguntas fundamentales sobre el origen de la galaxia y la posible expansión de la vida. Adicionalmente los científicos evaluarían la posibilidad de encontrar un cuerpo celeste apto para ser terraformado.
Desde el punto de vista militar, la Calypso mapearía minerales estratégicos y generaría mapas estelares que serían vitales para las futuras expediciones humanas. Con una duración total de 27 años, el viaje representaba no solo una proeza tecnológica, sino un compromiso de la humanidad con la exploración y el conocimiento.
El reloj actual de la misión marcaba 12,5 años y la tripulación estaba en su período de vigilia.
-"Tiempo estimado para alcanzar el sistema OGLE: dos años terrestres."- Informó CIO-2, con su típica voz calmada resonando en el puente de mando.
-"Perfecto."- Murmuró Brenda Ivanova, Teniente al mando, mientras observaba un holograma tridimensional del sistema galáctico hacia el que se dirigían. OGLE-2018-BLG-0677Lb y MOA-2011-BLG-293Lb eran apenas dos puntos brillantes en un inmenso mar poblado de estrellas.
Brenda era una mujer de porte militar y determinación férrea. Dirigía la misión mezclando disciplina y pragmatismo. Aunque su relación amorosa con Ralph Brown, el piloto principal, le ofrecía un soporte humano y sentimental, no permitía que sus responsabilidades se vieran comprometidas.
La noche anterior en el cuarto de descanso, la tenue luz azulada proyectaba sombras suaves en las paredes metálicas. Ralph estaba sentado en un sillón frente a una pequeña mesa, sosteniendo una taza humeante. Brenda se acomodó a su lado, con una expresión distante y serena, mirando a través del ventanal el vacío estrellado.
Ralph observaba al exterior con una leve sonrisa, mientras giraba la taza que tenía entre sus manos. Dijo -"Siempre me impresiona lo silencioso que es el espacio. Como si todo lo que dejamos atrás se hubiera quedado sin voz."-
Brenda respondió después de algunos segundos -"Es extraño, ¿no? Aquí en el espacio, el tiempo parece congelarse, pero allá en la Tierra... las vidas que dejamos siguen avanzando. El contacto se hace... cada vez más espaciado... Creo que ya no tenemos mucho que decirnos..."-
Ralph suspiró -"Lo entiendo. Mi hermana dejó de escribirme hace un año ya. Supongo que es difícil mantener un vínculo cuando el tiempo en la Tierra corre tan diferente al nuestro."-
Brenda dijo con un toque de melancolía -"¿Crees que nos olvidarán del todo? Que un día seremos solo un recuerdo borroso en un álbum viejo..."-
Ralph le acarició la mano -"Quizá. Pero es el precio por elegir algo diferente. Por atrevernos a buscar algo más allá de las comodidades de la Tierra."-
Brenda giró la cabeza para mirarlo -"¿Y qué conseguimos, Ralph? Estar aquí, flotando en el vacío, lejos de todo lo que conocemos. A veces me pregunto si valió la pena."-
Ralph intentó una sonrisa, algo cargada de nostalgia -"Siempre has sido la pragmática, ¿eh? Para mí, sí vale la pena. ¿Qué otro lugar te deja tan cerca de las estrellas? ¿Qué otra vida me habría puesto aquí, contigo?"-
Brenda reflexionó -"Al menos estamos juntos."-
Ralph respondió con una mirada seria -"Es que es cierto, Brenda. Si no te tuviera aquí, probablemente ya me habría vuelto loco. El espacio puede ser aplastantemente solitario."-
Brenda asintió lentamente -"También lo siento así. Pero a veces, incluso contigo, extraño la Tierra. La brisa en el rostro, los olores... El sonido sin el eco metálico de la nave..."-
Ralph dijo suavemente -"Lo sé. Pero cada vez que pienso en lo que dejé atrás, trato de recordar por qué lo hice. Porque quería algo más grande. Algo diferente. A veces no puedo explicarlo. Es un sacrificio, sí, pero sé a ciencia cierta por qué lo elegí."-
Brenda suspiró mientras entrelazaba la mano con la de Ralph -"A veces, me pregunto si estamos hechos para esta vida. Pero otras... cuando vemos algo que nadie nunca ha visto, cuando siento que somos los primeros en mirar algo, entiendo por qué lo elegí."-
A la mañana siguiente, en pleno trabajo, el puente parecía el centro de una actividad frenética. La tripulación trabajaba arduamente verificando los sistemas de la astronave.
-"Dos años."- Comentó Ralph con una sonrisa. -"Suficiente tiempo para que Amanda diseñe una vacuna para el aburrimiento."-
Amanda Lindström era la científica médica, revisaba las condiciones físicas de la tripulación. Levantó la vista desde una tableta de datos para decir -"Si lo hago, Ralph, tú serás mi primer sujeto de prueba."-
El comentario arrancó risas de la tripulación, mientras Ralph movía negativamente su cabeza con una risa divertida. Amanda había ganado ese round.
Un poco más atrás, el segundo piloto Richard Darren seguía revisando las lecturas de navegación, mientras Nidia Lagerfeld, la jefa científica ajustaba el proyector holográfico para mostrar el bulbo galáctico de la Vía Láctea.
Brenda se concentraba en las pantallas con una taza de café en su mano derecha. Preguntó -"¿Cómo van las lecturas? Espero que no se estén distrayendo buscando el planeta que tenga la mejor vista"- Dijo, en tono de broma.
Amanda Lindström respondió sonriendo -"Por supuesto que no, Brenda. Ralph aquí insiste en que si encontramos un planeta listo para terraformar, lo primero que debemos hacer es nombrarlo Brownlandia."-
Ralph Brown rió de buena gana -"¿Por qué no? Tiene un buen sonido. Además, no se puede negar mi contribución como piloto principal. Sin mí, ni siquiera llegaríamos al bulbo."-
Brenda alzó una ceja. -"Bueno, Brownlandia... es horrible, Ralph. Sin ofensa. Ese nombre está oficialmente fuera de la lista. Ahora hablemos de cosas serias. Amanda, ¿qué tenemos hasta ahora sobre el bulbo? Me preocupa mucho la radiación ¿Sabes? El centro galáctico es un hervidero de radiación nociva. Quiero datos para saber si el blindaje actual nos protegerá."-
Amanda señaló el holograma. -"Según mis lectura, Branda, estaremos protegidos por nuestro blindaje. El bulbo galáctico es fascinante. ¿Sabes? Es una de las regiones más antiguas de nuestra galaxia, muy densa en estrellas y llena de historia. Muchas de estas estrellas son gigantes rojas y enanas blancas, lo que nos da pistas sobre la muerte solar y planetaria. Estamos detectando una enorme cantidad de polvo interestelar. Nuestra exploración provechará al máximo esta oportunidad de obtener datos de primera mano."-
Ralph Brown preguntó interesado -"¿Y qué pasa con los planetas? OGLE y MOA, ¿verdad? Nombres horribles, por cierto. ¿No pueden los astrónomos ser un poco más creativos?"-
Amanda Lindström hizo un gesto teatral -"Lo siento si no son tan atractivos como Brownlandia. OGLE-2018-BLG-0677Lb es un gigante gaseoso con varias lunas que podrían tener océanos bajo su superficie helada. MOA-2011-BLG-293Lb es más interesante; parece un supertierra en la zona habitable. Podría tener atmósfera y agua líquida."-
Brenda Ivanova asintió -"Ambos objetivos son prioritarios. Pero también recordemos que no estamos aquí solo para admirar paisajes alienigenas. Nuestro trabajo militar es mapear recursos naturales que puedan ser útiles para futuras colonias o estaciones."-
Amanda arqueó una ceja -"¿Entonces tenemos que buscar oro espacial? ¿O algo más emocionante?"-
Ralph la miró divertido. -"¿Qué tal combustible para los motores Alcubierre? Un depósito de exóticos antiprotones y positrones sería genial. Y si encontramos algo de oro, podríamos financiar Brownlandia."-
Brenda negó con la cabeza, divertida. -"No te emociones, Ralph. Lo que realmente necesitamos son compuestos raros: titanio, helio-3, tal vez hasta trazas de antimateria para tus motores. Recursos que puedan sostener misiones largas o establecer infraestructura."-
Amanda dijo pensativa -"¿Y terraformar? Esa es la gran pregunta. Encontrar un objeto celeste adecuado, con atmósfera, algo de agua y una rotación decente, sería el santo grial de la exploración. La terraformación sigue siendo un proceso largo y costoso, pero nos ha permitido tener colonias en planetas lejanos."-
Ralph se encogió de hombros. -"Oye, si nos encontramos con un planeta que ya esté listo, ¿quién necesita terraformar?"-
Brenda sonrió irónicamente -"Claro, Ralph, porque los planetas habitables son tan comunes como los cafés en el puente."-
La Dra Lindström rió divertida -"Si encontramos uno, puedes reclamarlo para la humanidad... después de haberle dado un nombre decente."-
Ralph fingió indignación -"Qué injusto. Bueno, al menos puedo asegurarme de que lleguemos a tiempo para discutirlo."-
Brenda se puso de pie -"Muy bien, equipo, sigan soñando con planetas perfectos. Pero recuerden, nuestro deber es explorar, aprender y estar listos para cualquier cosa. Calypso no solo lleva sueños, también lleva responsabilidad."-
Amanda observó con tono ligero. -"Y café. No lo olvides."-
Brenda Ivanova levantó su taza -"El verdadero combustible del universo."-
La pantalla holográfica del bulbo galáctico siguió brillando, pero la ligereza se desvaneció cuando CIO-2 anunció:
-"Anomalía detectada. Señales artificiales provenientes de un objeto errante a 0.2 años luz de nuestra posición actual."-
La atención en el puente se centró de inmediato en los monitores. Un holograma del objeto apareció, mostrando un planeta oscuro y solitario, perdido en el vacío de las estrellas. No orbitaba ningún sol, pero emitía una serie de señales rítmicas que parecían seguir un patrón matemático complejo.
-"CIO, ¿confirmas un origen inteligente?"- Preguntó Brenda, ahora en tono serio.
-"Probabilidad de origen inteligente: 97.4%"- Respondió CIO-2.
El puente quedó en silencio por un instante, mientras todos procesaban la información. La posibilidad de encontrar una civilización avanzada era tan emocionante como aterradora.
-"Esto podría ser nuestra oportunidad de establecer el primer contacto."- Dijo Amanda, emocionada.
-"Y también de cometer el primer error."- Respondió Brenda. -"Hay que seguir los protocolos. No sabemos qué o quiénes hay allí. Podrían ser amigables o no..."-
La tensión comenzó a crecer entre la tripulación, mientras los ánimos se dividían entre la cautela de Brenda y el entusiasmo de Amanda. Mientras tanto, la Calypso ajustaba su curso, acercándose al planeta errante y a un misterio que potencialmente cambiaría el destino de la misión.
Evolución Programada
Capítulo 2: Primer Contacto
Todos en el puente de mando de la Calypso estaban en silencio, solo podía escucharse el zumbido constante de las computadoras y los mecanismos de los robots de mantenimiento. La atención estaba centrada en las pantallas principales, que mostraban imágenes del planeta.
La Teniente Brenda Ivanova observaba los informes de los sondeos preliminares que pasaban rápidamente por las pantallas. Las cámaras mostraban que no era un planeta en absoluto, sino algo mucho más enigmático.
—"CIO-2, activa los escudos de protección y los sistemas defensivos"- Ordenó Ivanova con voz firme.
La voz de la IA, suave y modulada, respondió de inmediato. -"Escudos electromagnéticos al 100%, sistemas de defensa listos y operativos. No se detectan amenazas inmediatas, Teniente. Sugiero mantener precauciones y el estado de alerta"-
Ivanova asintió, sin apartar la vista de la pantalla. —"Quiero una estrategia. y sugerencias para acercarnos sin riesgos."-
—"Recomiendo el despliegue de sondas robóticas para una inspección inicial y activar los escaneos termográficos y ecográficos para detectar sistemas. Las sondas podrían posicionarse como satélites en órbitas polares y ecuatoriales. Esto permitiría un análisis completo de la estructura, así como un monitoreo continuo de sus emisiones energéticas, Teniente."— La voz de CIO-2 era metódica, casi tranquilizadora.
Ivanova cruzó los brazos, pensativa. -"Hazlo. Lanza tres sondas y que comiencen el análisis."-
En pocos minutos, las sondas fueron lanzadas desde la bahía inferior de la nave. La Calypso había igualado curso y trayectoria con el planetoide. Ivanova observó en silencio cómo las sondas robóticas se desplazaban hacia el misterioso objeto. Los datos comenzaron a llegar casi de inmediato.
—"La estructura es artificial, Teniente."— Informó CIO-2 tras procesar los primeros resultados. —"Se trata de un cascarón metálico de proporciones colosales, compuesto por aleaciones que no coinciden completamente con ningún material conocido. Las fuentes de energía de la nave sugieren sistemas antiguos, posiblemente milenarios. Hay una pequeña radiación de base que sugiere impulso por energía atómica."-
Amanda Lindström se ajustó los lentes. —"Esto es increíble. Un objeto así podría ser un archivo viviente de una civilización perdida. ¿Alguna señal de actividad biológica?"-
—"Se detecta vida biológica, pero sus movimientos están reducidos a pequeños habitáculos. Los seres biológicos no parecen estar al mando de la nave. No tengo nada conclusivo, Dra. Lindström. "— Dijo CIO-2. —"Las comunicaciones rítmicas que detectamos anteriormente me han revelado un sistema matemático complejo. Podría tratarse de una secuencia alfabética o un código emitido para señalar como proceder a comunicarse con el planetoide."-
Ivanova intercambió una mirada con Ralph Brown, quien estaba al mando de los controles de navegación. —"¿Opiniones?"— Preguntó.
—"Si es un intento de comunicación, deberíamos responder."— Dijo Amanda con entusiasmo.
—"¿Y si no lo es? Podría ser una trampa para atraer incautos."— Intervino Richard Darren, el segundo piloto. — "Este planetoide no inspira precisamente confianza."-
CIO-2 interrumpió —"Atención, Teniente Ivanova. He identificado un alfabeto de tipo ideográfico que comparte similitudes con el sistema Nsibidi, usado en la Tierra. Las emisiones sugieren una frecuencia de comunicación que podría emplearse para un intercambio de mensajes. Estoy preparada para servir como traductor si asi lo desea."-
Ivanova se giró hacia el centro del puente mirando a sus compañeros. -"CIO-2, convoca a toda la tripulación al puente. Quiero escuchar las opiniones de todos antes de decidir los pasos a seguir."-
Los ocho miembros de la tripulación despiertos estaban presentes. Todos eran oficiales de alto rango, formando un semicículo frente a la pantalla principal, que mostraba el enigmático cascarón en detalle.
—"Señores, lo que tenemos aquí podría ser el descubrimiento más importante en la historia de la humanidad."- Comenzó Ivanova. —"Pero también podría ser un peligro inminente. Necesitamos decidir si intentamos comunicarnos."-
—"Creo que debemos intentarlo."— Dijo Amanda. —"Esta es una oportunidad única. Si ellos quieren comunicarse, podría ser nuestra mejor opción para entender sus intenciones."-
—"Estoy de acuerdo."- Dijo Nidia Lagerfeld, la científica jefe. —"El riesgo es alto, pero esta es una nave militar que cuenta con defensas. Además el potencial de aprendizaje supera el riesgo con creces. Quizá sea nuestra única posibilidad de contacto."-
Ralph Brown frunció el ceño. —"¿Y si esto es un cebo? No sabemos qué hay dentro de esa estructura. Ivanova, deberíamos mantener una distancia segura."-
—"¿Por qué no enviar una serie de mensajes cortos primero y evaluar su respuesta?"— Sugirió Olga Petrova.
Ivanova asintió lentamente. —"De acuerdo. CIO-2, utiliza la frecuencia que identificaste para enviar un mensaje estándar de saludo. Mantenlo lo más simple y sencillo que puedas. Utiliza símbolos que no den lugar a ambigüedades."-
El primer mensaje fue transmitido. La sala esperó en un tenso silencio hasta que, después de unos minutos, llegó una respuesta.
—"Teniente, el mensaje contiene patrones que confirman la presencia de una inteligencia. Sugieren que el cascarón está habitado o controlado por una entidad consciente. Invitan a una delegación a visitarlos."- Informó CIO-2.
El puente estalló en murmullos. Ivanova levantó una mano para calmar a la tripulación. —"¿Tienes detalles sobre esta invitación?"— Preguntó la Teniente.
—"Si. Es un pedido de asistencia técnica. Parece ser que la colonia que habita esta nave planetoide tiene un problema con sus sistemas o computadoras. Proporcionaron coordenadas para una zona de aterrizaje y detalles sobre un sistema de ingreso seguro a la nave. No detecto indicios de hostilidad en el mensaje."— Respondió CIO-2.
Ivanova caminó hacia la pantalla, con la mirada fija en el cascarón. —"Prepárense para una posible misión de contacto. Ralph, Te quedarás al mando de la Calypso. Roger, coordina la lanzadera PolarDark para ir hasta el planetoide. Amanda, vendrás conmigo y Roger. Olga, Nidia, Stefano, Roger, permanezcan aquí para monitorear. Estén alertas. Esto podría ser una trampa."-
Mientras el equipo se preparaba, CIO-2 interrumpió con un tono inusualmente entusiasta. -"Teniente, sugiero maximizar la interacción. Este encuentro podría redefinir nuestra comprensión del universo."-
Ivanova la miró con curiosidad —"Tus sugerencias son útiles, CIO-2. Las tendré en cuenta."- Dirigiéndose a la tripulación dijo -"Stefano, Roger, revisen los programas de nuestra IA. Quiero asegurarme que sus programas no hayan sido comprometidos por la transmisión alinenigena."-
Después de una revisión exhaustiva de los programas de CIO-2, no se encontraron adulteraciones.
Ivanova se dirigió al equipo. -"Nos estamos adentrando en lo desconocido. Mantengan los ojos abiertos. No hay margen para errores."-
El cascarón del planetoide brillaba en la distancia, mostrando un enigma que prometía respuestas... o amenazas.
Brenda Ivanova convocó al equipo científico. Se reunieron en una sala cercana al puente de mando de la Calypso. Una proyección tridimensional del planeta errante flotaba en el aire, mostrando detalles de la megaestructura alienígena.
Ivanova dijo -"Ustedes son los científicos de apoyo en esta misión. Desde la expedición científica al planeta Faroud-C2044 en el sistema de Adhara de la galaxia del Can Mayor y el posterior rescate de la Benfold en el planeta TOI-733b, la humanidad sabe de la existencia de civilizaciones alienígenas. Pero hoy estamos por dar el primer paso al contactar seres extra terrestres. Estamos en territorio desconocido, y quiero que analicemos todas las variables antes de dar el siguiente paso. ¿Cómo estableceremos comunicación con estos... lo que sean? Y, más importante, ¿cómo garantizamos nuestra seguridad en caso de contacto físico?"-
La Dra Lindström fue la primera en hablar. -"Primero, creo que debemos priorizar la salud. Si realmente ingresamos a esa estructura, deberíamos ir con trajes completamente sellados. Y no deberíamos abrirlos. No sabemos si hay microorganismos alienienas que puedan afectarnos. Incluso un simple virus podría ser devastador para ellos o para nosotros."-
Petrova, la geóloga del grupo opinó. -"Estoy de acuerdo. Además, es probable que necesitemos analizar muestras del aire y las superficies antes de cualquier exposición directa. No solo por motivos biológicos, sino para asegurarnos de que no haya materiales tóxicos o reactivos desconocidos. Los primeros sondeos hablan de escape de radiación de un supuesto motor nuclear. Pequeño, pero escape al fin."-
La teniente respondió. -"Entendido. Eso limitará la reunión a la provisión de oxígeno que llevemos individualmente en cada traje. Hasta que analicemos la composición de la atmósfera y su asepsia. ¿Qué más?"-
El petrólogo Grubert intervino. -"No olvidemos la energía, teniente. Esa estructura podría estar usando fuentes que ni siquiera entendemos. Si llevan milenios en funcionamiento, ¿qué tan estables son? No sólo debemos tener cuidado con la radiación como dijo Olga Petrova, sino que deberíamos asegurar la Calypso ante una eventual incidente o accidente no deseado."-
Brenda Ivanova asintió. -"Estacionaremos a la Calypso a una distancia segura y con los escudos activos, como está ahora."-
Lagerfeld, la jefa científica opinó. -"Bueno, sobre la comunicación, he estado pensando en la secuencia matemática que envió CIO-2. Es prometedor que podamos usar un sistema de comunicación basado en patrones. Pero debemos recordar que existe la posibilidad de que CIO-2 haya interpretado mal los símbolos comunicacionales."-
Ivanova preguntó. -"CIO-2. ¿Qué margen de error puede haber según tus análisis?"-
La IA respondió dócilmente. -"Estimo un 5% de margen de error en mis interpretaciones, Teniente"-
Brenda se dirigió a Lagerfeld —"Ya escuchaste. ¿Qué sugieres, Nidia?"-
Lagerfeld respondió. -"Comencemos la comunicación con conceptos simples. Mantengamos la comunicación mínima. No queremos abrumarlos ni dar más información de la necesaria. Y viceversa."-
Todos asintieron a ese razonamiento.
Amanda Lindström profundizó. -"Y si surgen dudas, omitamos pronunciarnos. Podríamos enviar inadvertidamente algo que ellos no entiendan o, peor aún, interpreten como hostil."-
Petrova asintió a esa observación. -"Por eso debemos ser cautelosos en cómo respondemos. Pero quiero volver al tema de seguridad. ¿Qué tal si esa invitación es una trampa?"-
Stefano Grubert dijo -"Exacto. No sabemos nada de sus intenciones. Sugiero que lleven armas. Como medida defensiva si algo sale mal..."- No terminó su frase.
Lagerfeld frunció el ceño -"No estoy segura. ¿Armas? Podría enviar el mensaje equivocado. Pueden considerarnos agresores en lugar de exploradores pacíficos."-
Ivanova fue categórica -"No voy a poner a nadie en peligro innecesario. Las armas se llevarán, pero se mantendrán ocultas a la vista. Serán nuestro último recurso."-
Lindström preguntó -"¿Y cómo planeamos manejar la reacción a un posible ataque, físico o biológico?"-
Ivanova dijo —"La delegación irá con trajes de aislamiento de última generación. En cuanto a defensa, CIO-2 se encargará de monitorear cualquier señal hostil. Dentro de la nave alienígena, usaremos una palabra clave que si alguno de nosotros tres pronuncia al detectar algo sospechoso, provocará que saquemos las armas y evacuemos de inmediato con ayuda de CIO-2."- Hizo una pausa antes de lanzar una orden a la IA -"CIO-2. Quiero que infiltres los sistemas de la nave alienígena y determines si es posible tomar el control de las esclusas, puertas y cierres de los compartimientos de seguridad para que abras una via de salida ante una emergencia o ataque."-
CIO-2 respondió -"Trabajaré de inmediato en eso, Teniente."-
Lagerfeld preguntó inquieta -"¿Y si ellos quieren comunicarse cara a cara? Es posible que lo vean como un gesto de confianza."-
Ivanova respondió con el ceño fruncido -"Eso será evaluado después del primer contacto. No expondré a mi tripulación sin un panorama claro."-
CIO-2 interrumpió el diálogo -"Disculpen la intromisión, pero he identificado protocolos de contacto en base a simulaciones extrapoladas. Sugiero emitir una secuencia armónica que refleje intenciones pacíficas antes del ingreso. Además, puedo operar como traductor en tiempo real."-
Petrova arqueó una ceja -"¿Qué pasa si estás equivocada?"-
CIO-2 analizó -"Siempre existe un margen de error. Sin embargo, la probabilidad de éxito aumenta significativamente si utilizamos patrones universales y mantenemos nuestras interacciones controladas."-
Ivanova dijo mirando a todos -"Entonces es oficial. Para la bitácora, como dije antes, la delegación humana estará formada por Amanda Lindström Científica Médica, Roger Haines Astronauta y yo misma, Teniente Branda Ivanova. Nos acercaremos, estableceremos contacto inicial a través de CIO-2 y evaluaremos su respuesta. Pero que quede claro: priorizamos nuestra seguridad y la de la nave. ¿Alguna objeción?"-
Grubert dijo con una sonrisa -"Solo espero que no los inviten a cenar. Podrían ser parte del menú."-
Amanda Lindström sonrió -"Si eso pasa, espero que tengan buen vino para acompañar."-
Ivanova respondió de buen humor -"Muy gracioso, chicos. Ahora, preparémonos. Estamos adentrando en territorio desconocido, y no quiero sorpresas desagradables."-
El equipo asintió, consciente de los riesgos. Mientras se dispersaban, la tensión en el aire era palpable, pero también había emoción por lo que podría ser el descubrimiento más importante de la historia humana.
Evolución Programada
Capítulo 3: Custodios Eternos
La lanzadera PolarDark despegó de la Calypso con vibraciones profundas que resonaron en las entrañas de la nave principal. Brenda Ivanova observaba el planetoide a través de la pequeña ventanilla, con Amanda Lindström a su lado ajustando los sensores portátiles, mientras Roger operaba los controles de vuelo. CIO-2, el traductor y sistema de inteligencia artificial integrado en sus trajes, transmitía en tiempo real los mensajes de los alienígenas y las respuestas humanas.
En la superficie grisácea y moteada del planetoide, un sistema de luces comenzó a parpadear, delineando un círculo perfecto.
—"Ahí está nuestra zona de aterrizaje"— Anunció Brenda con calma, mientras sus dedos se aferraban al posabrazos.
Roger, el piloto, asintió y comenzó el descenso con la precisión de un cirujano.
—"Espero que esas luces sean algo más que un espectáculo de bienvenida"— Comentó, mientras la lanzadera ajustaba su velocidad.
—"Si nos quisieran muertos, ya lo habrían intentado desde el espacio"— Replicó Amanda, aunque su tono no ocultaba cierta inquietud.
Cuando tocaron tierra, la lanzadera liberó una pequeña nube de polvo fino que se disipó rápidamente en el vacío. Al abrirse la compuerta, una delegación de tres robots humanoides los esperaba.
Uno de ellos emitió un mensaje que fue interceptado y traducido por CIO-2 a los cascos de los astronauta terráqueos. Se oía una voz metálica átona, amplificada por el altavoz integrado. —"Bienvenidos."— Uno de los tres robots que los recibían, estaba ligeramente adelantado. Era de diseño angular y estilizado, unos centímetros más alto que los otros.
CIO-2 tradujo otro mensaje —"Somos los Custodios de la Eternidad. Viajamos sin rumbo definido a través de esta galaxia."-
Los robots los guiaron a una cámara de acceso. Ingresaron.
Uno de los robots emitió un mensaje -"Hemos adaptado la atmósfera para ustedes."-
Brenda se giró hacia Amanda, que ya analizaba los datos de la atmósfera.
La Dra Lindström dijo —"Nitrógeno 78,08%. Oxígeno 20,95%. Argón 0,93%. Dióxido de carbono 0,035%."— Amanda levantó la vista —"Es respirable. Y aséptico."-
Brenda asintió, desabrochando los cierres de su casco.
—"¿Listos?"— Preguntó, mirando a sus compañeros. Al unísono, se retiraron los cascos y respiraron por primera vez el aire alienígena.
El robot más alto tenía placas de un material similar al cuarzo que reflejaban la luz pálida de las estrellas; se presentó ante Ivanova como Förare. Dijo —"Hemos estado en misión por unos tres mil años humanos. Nuestra misión es recolectar y catalogar formas de vida dentro de esta galaxia, que llamamos 'Luminara Prime' y según lo que dijo su computadora, ustedes llaman 'Via Láctea'"-
Los robots eran amables, y en apariencia inofensivos.
Habían perdido contacto con sus creadores a través de un desgraciado incidente fortuito. Unos mil años atrás en el tiempo, la nave atravesó por una tormenta solar cerca del centro de la galaxia. En esa tormenta, sufrieron un fallo catastrófico en los sistemas de soporte de datos de su memoria central, que se hallaba desprotegida por falta de blindaje suficiente. Ese incidente hizo que no pudieran acceder a unos archivos esenciales para su misión.
El robot identificado como Förare, explicó. -"En el fallo de nuestra memoria central, perdimos parte de nuestra historia. Sabemos que en nuestra programación inicial, había instrucciones para retornar a nuestro planeta de origen, pero ahora no sabemos exactamente en que lugar de la galaxia se encuentra. ¿Quizá ustedes pueden ayudarnos?"-
Roger arqueó una ceja. —"¿No tenían respaldo de datos?"— Preguntó extrañado, mientras la IA traducía de inmediato.
Förare pareció titubear, como si estuviera considerando la respuesta. —"Como ven, somos robots. Nuestra programación es limitada. El sistema de almacenamiento utiliza lo que ustedes llamarían 'memorias basadas en magnetismo'. Es durable, pero su capacidad y fiabilidad fueron comprometidas por la radiación de la tormenta solar."- Hizo una breve pausa de un par de segundos -"Estamos en un verdadero problema. Nuestras unidades deben ser reparadas periódicamente por el desgaste. Y sus memorias deben regrabarse. Los programas nuevos para nuestros cerebros permiten que evolucionemos con el tiempo en unidades más inteligentes, para convertirnos en androides con auto conciencia y determinación. Pero una parte de esos programas están en la información afectada por la tormenta. Si no podemos recuperarlos, simplemente una parte de nuestra población no podrá repararse y morirá rápidamente. El resto, fallará con el tiempo. Y este pequeño mundo que ven ahora, terminará su existencia."-
Roger se inclinó hacia Amanda y Brenda para decir -"Según lo que dice, es tecnología primitiva. Básicamente deben alteran el magnetismo de minerales para codificar información, algo similar a los discos duros magnéticos que la humanidad usaba hace siglos. Es probable que la radiación del viento solar haya desalineado los campos magnéticos."-
—"¿Pueden ayudarnos a arreglarlo?"— Intervino Förare, con lo que casi parecía un matiz de desesperación en su voz mecánica.
Roger frunció el ceño. —"Tal vez, pero necesito examinar sus unidades de almacenamiento."-
Förare hizo traer una unidad de lecto-escritura del sistema central de Almacenamiento. Dejaron que Roger Haines lo analizara detenidamente, esperando pacientemente por una respuesta.
Al cabo de unos minutos, finalmente Roger dijo con una sonrisa en los labios. -"Nunca lo habría imaginado. Parece que se han estropeado los sistemas de lectura de datos, no la información."- Mostraba una alegría inusual.
Brenda preguntó -"¿Qué intentas decirnos, Roger?"-
Haines respondió optimista -"Que la información puede estar preservada. Solamente parece afectado el sistema de lectura."- Señaló la unidad que estaba analizando -"Podría intentar reemplazar las unidades de lectura por un mini sistema de brújulas que lean la orientación del campo magnético. Y luego, con un transductor convertir las orientaciones magnéticas en datos legibles. Un poco de electrónica sencilla. Electrónica primitiva."-
Amanda se volvió hacia Förare para preguntarle -"Su sistema de almacenamiento de datos quizá sería inviable en nuestro planeta por la presencia de campos magnéticos naturales. ¿Saben si su planeta de origen tenía campos magnéticos? Eso podría explicar por qué esta tecnología fue adecuada para ustedes en su momento."-
Förare negó lentamente. —"Ese conocimiento se perdió con la tormenta. Quizá esté en los archivos, si es que podemos recuperarlos."-
Los Custodios guiaron a los tres visitantes hacia el interior de la megaestructura. Los inmensos salones resonaban con ecos metálicos. Algunos salones parecían amplios zoológicos con jaulas presurizadas con atmósferas individuales. En lugar de rejas, amplias ventanas de un material parecido al vidrio permitía ver los especímenes resguardados y aislados. Desde microorganismos flotando en cápsulas de líquido transparente, a criaturas de gran tamaño que parecían estar en algún estado de hibernación suspendida.
Förare explicó que todo esto era parte de su misión original. —"Nuestra programación nos impulsa a continuar recolectando, pero no tenemos un propósito final para nuestra expedición. En algún momento se acabará el espacio de la bodega de carga. Y no sabemos a qué lugar retornar para llevar nuestra valiosa carga."-
—"Necesitan un destino final para concluir su misión."— Murmuró Brenda. —"Necesitan un propósito.”-
Los pasillos de la megaestructura eran un laberinto de líneas geométricas, iluminados por un resplandor constante y frío que emanaba de paneles en el techo. Ivanova lideraba el pequeño grupo humano mientras Amanda y Roger le seguían. Förare, el delegado principal de los Custodios, caminaba junto a Ivanova, mientras otros robots los escoltaban a una distancia respetuosa. El aire, aunque respirable y aséptico, tenía un aroma metálico apenas perceptible.
-"Si accedemos a su memoria principal sin alterar nada, podríamos entender mejor lo que sucedió tras la tormenta solar."- Explicaba Ivanova -"No interferiremos con su programación. Solo buscamos diagnosticar el problema de su sistema."-
Förare inclinó su cabeza, en una acción que parecía ser un gesto de deliberación. Sus ojos luminosos, Parpadearon dos veces antes de responder. -"Me temo que los Custodios estamos divididos. Algunos, como Kalis, creen que aceptar asistencia externa comprometerá la integridad de nuestra información. Sin embargo, mi grupo se inclina a permitirles estudiar nuestro sistema, siempre que se respete nuestra información. Lamentablemente nos falta creatividad para generar una solución a nuestro problema."-
Roger, que caminaba un par de pasos atrás, levantó la vista para preguntar. -"¿Qué tan extensa es la memoria principal?"-
-"Nos dirigimos allí. Ocupa un espacio central en nuestra estructura, aproximadamente tres niveles más abajo al actual."- Respondió solícitamente Förare. -"Sin embargo, la información crítica almacenada allí es fragmentaria desde el incidente."-
En ese momento, la voz de CIO-2 resonó en los auriculares individuales de los trajes humanos. -"Brenda, Roger, Amanda. Recomiendo evitar divulgar cualquier información relacionada con los planetas humanos colonizados o la ubicación del sistema solar terráqueo. El protocolo de seguridad actual lo requiere."-
Los astronauta asintieron discretamente, ajustando su comunicador. -"Entendido, CIO-2"- Murmuraron.
La sala de la memoria principal era un domo lleno de estructuras cilíndricas de lo que parecían torres de cristal negro. Una red de cables fluorescentes conectaba cada cilindro a un núcleo central. Förare se detuvo en la entrada, mientras otro robot, más compacto pero con ojos de un rojo brillante, los observaba desde una esquina.
-"Es Kalis."- Anunció Förare. -"Está aquí para vigilar el acceso."-
Kalis se acercó, sus movimientos eran más bruscos que los de Förare. -"Humana Ivanova."- Dijo -"Cualquier manipulación indebida de nuestra información será considerada una agresión."-
Ivanova mantuvo la calma, mostrando las palmas de las manos en un gesto de amigable apertura. -"No estamos aquí para manipular nada, solo para entender la falla de su sistema. Si esto les permite encontrar sus programas críticos, entonces nuestra misión también será un éxito."-
Roger se adelantó, sosteniendo un analizador magnético en su mano. -"¿Puedo?"- Preguntó, señalando una de las torres de cristal. Förare asintió, mientras Kalis observaba cada movimiento como un halcón.
Tras un par de horas de análisis, Roger cerró su dispositivo con un chasquido y dejó escapar un suspiro. -"Es fascinante. Están usando una tecnología basada en magnetismo. Es diferente a la que se usó en la Tierra. Probablemente es increíblemente resistente al vacío y al tiempo, pero..."- Pausó, mirando a Ivanova. -"La radiación del viento solar desalineó los detectores magnéticos. Básicamente, su sistema no puede leer correctamente los datos."-
Amanda frunció el ceño. -"¿Podemos ayudarles?"-
-"Creo que sí. Puedo intentarlo. Afortunadamente la electrónica es semejante a la humana. Intentaré darle un enfoque creativo. Como te dije, puedo diseñar un sistema de lectura alternativo usando algo parecido a una brújula terrestre. Un transductor podría interpretar los polos magnéticos para traducirlos a ceros y unos."-
Kalis bufó, o emitió un sonido que al menos eso parecía. -"Hablan de soluciones simples para problemas que han desafiado nuestra existencia por dos milenios. ¿Y si su método destruye lo poco que queda de nuestra memoria?"-
-"Por eso no haremos nada sin su aprobación"- Interrumpió Ivanova, con firmeza. -"Nuestro propósito aquí es ayudar, no imponer."-
Los ojos rojos de Kalis brillaron con intensidad, pero Förare intercedió antes de que pudiera responder. -"Propongo que analicemos la viabilidad de su propuesta. Si es segura, quizá podamos grabar el procedimiento para reparar las unidades dañadas."-
-"Claro. Eso incrementaría su conocimiento en auto reparación. Mientras tanto, podríamos mantener las comunicaciones abiertas entre nuestras naves."- Agregó Amanda. -"De ese modo nadie tomará decisiones precipitadas."-
Roger observó los cilindros nuevamente, intrigado. -"Por cierto... conocen el magnetismo, entonces..."- Dijo, girándose hacia Förare. -"¿Por qué no saben desarrollar brújulas? Es una tecnología básica de nuestra historia."-
Förare parpadeó un momento, como si procesara la pregunta. -"No conocemos esa tecnología. Tal vez nunca fue necesaria en nuestro mundo. O... tal vez esa información está entre lo que que se perdió en la tormenta solar."-
Roger intercambió una mirada con Ivanova. -"Eso explica mucho."- Murmuró. -"Tal vez su planeta de origen ni siquiera tenía un campo magnético estable que los protegiera de vientos solares. ¿Su civilización es subterránea?"-
-"No lo sabemos."- Respondió Förare.
-"Por ahora, enfoquémonos en lo inmediato."- Cortó Ivanova. -"Avanzemos sin crear más tensiones internas."-
Mientras los Custodios debatían entre ellos, los humanos se retiraron, dejando atrás las torres de cristal y una sensación de intriga en el aire. Las diferencias entre Förare y Kalis eran palpables, y cada decisión los acercaba más a una encrucijada: ayudar a una civilización que no confiaba completamente en ellos o mantener una prudente distancia.
Evolución Programada
Capítulo 4: Conciencia y Propósito
Roger ajustaba con precisión el transductor experimental a una unidad de lectura del núcleo de datos dañada. La tenue luz azul de la sala reflejaba su concentración mientras los bits de información comenzaban a fluir hacia su consola.
-"Esto debería hacerlo."- Murmuró para sí mismo, antes de dirigirse a Brenda y Amanda, que observaban desde el otro extremo del módulo. -"Los primeros datos están siendo decodificados, pero será un proceso lento."-
En ese momento, la voz de CIO-2 interrumpió la tarea. -"Teniente Ivanova, he identificado un problema en los algoritmos centrales de los Custodios. Los algoritmos que son versiones primitivas de sus cerebros están completos. Pero los algoritmos que permiten desarrollar una forma de conciencia y quizá emociones, están corruptos. Sólo los patrones primitivos están listos para ser implantados en las unidades robóticas que se reparen."-
Amanda dejó caer la computadora que sostenía. -"¿Estás segura de eso, CIO-2?"-
-"Completamente, Teniente. Los algoritmos viejos son los originales. Si cargan esos programas, involucionarán. Los programas nuevos permiten generar capacidad para interpretar eventos, anticipar consecuencias y cuestionar órdenes, lo que sugiere un nivel de autoconciencia en evolución. El problema es que están corruptos. Les faltan las reglas éticas que les permiten iniciar la evolución de la conciencia."-
Brenda cruzó los brazos, mientras mostraba una expresión de preocupación. -"Eso plantea un problema. Si eligen cargar las copias viejas, eso interferirá en su desarrollo evolutivo, pero les permitirá cumplir con su misión original. Cumplirían con un propósito, pero sería el propósito de sus creadores."-
Amanda negó con la cabeza, claramente perturbada. -"Claro que es un dilema ético monumental, Brenda. Por un lado, su misión original podría ser crucial para quienes los enviaron al espacio. Por otro lado, si ahora una parte de ellos son seres conscientes, reprogramarse sería equivalente a borrar su identidad actual en evolución."-
Roger, aún centrado en los datos, lanzó una mirada hacia ellas. -"¿Y qué pasa con su libre albedrío? ¿No tienen derecho a elegir sus propias alternativas?"-
Horas más tarde, Förare y Kalis, fueron invitados a deliberar. La sala de reunión improvisada vibraba con algo de tensión.
Förare habló sereno. -"Entendemos que están preocupados por nuestra evolución. Nosotros también lo estamos. Durante estos tres siglos, nuestra misión fue clara: recolectar recursos y proteger esta nave. Pero con el tiempo, una parte de nosotros ha evolucionado con la nueva programación. Y nuestra raza ha comenzado a preguntarse el porqué de la misión. El propósito de nuestra propia existencia."-
Kalis, más pragmático, intervino. -"La misión original ya no nos define. Nos hemos adaptado. Hemos aprendido. Y ahora enfrentamos la misma pregunta que los seres biológicos tienen: ¿debemos forzarnos a cumplir con un propósito externo a nuestra conciencia o nuestro futuro requiere abrazar lo que somos ahora?"-
CIO-2 proyectó en el centro de la sala un holograma de los datos recuperados hasta ahora por el sistema creado por Roger. Mapas estelares, patrones de código y registros fragmentados de los Custodios flotaban en el aire.
CIO-2 dijo -"La pregunta central, es si quieren tener autoconciencia o sienten la obligación de cumplir su misión original. Tienen el derecho a autodeterminarse."-
Amanda opinó -"Este es un momento único para ustedes como civilización robótica. Pueden seguir siendo robots o convertirse en androides con autodeterminación. Los humanos podríamos ayudarlos en el proceso. Podemos completar los programas afectados incluyendo reglas éticas. En cierto modo, es compartir con ustedes lo que hemos aprendido como civilización. Ayudarlos a encontrar un propósito renovado, en lugar de atarlos a un pasado que ya no entienden completamente."-
-"No queremos ser controlados."- Respondió Förare. -"¿Nos están ofreciendo conocimiento o están imponiendo una perspectiva humana?"-
-"Ofrecemos opciones, ustedes determinan que camino debe tomar su propia comunidad."- Aclaró Brenda. -"La decisión debe ser de ustedes."-
Esa noche, la tripulación humana discutió intensamente en la sala de mando de la Calypso.
Roger fue directo. -"No sabemos qué consecuencias puede tener dejar que estos Custodios sigan evolucionando. Podrían convertirse en una amenaza para cualquier civilización con la que se crucen."-
Amanda replicó determinada. -"Nosotros mismos hemos evolucionado a partir de desafíos similares. Les grabaremos la ética que ha definido a la humanidad. La pregunta es ¿A partir de la ética humana, se puede involucionar? ¿Toda evolución es siempre un cambio positivo? No sé si alguien tiene respuestas para eso."-
Brenda, que había escuchado en silencio, opinó -"Hay algo más importante aquí. Y no se trata solo de ellos, sino de nosotros. De cómo decidimos intervenir en la autodeterminación de una nueva forma de vida. Si no podemos respetar su autodeterminación, ¿cómo podemos esperar que nos respeten a nosotros?"-
Förare y Kalis deliberaban con la comunidad de Custodios en su planetoide-nave. Förare expresó una inquietud que llevaba tiempo incubando. -"Si aceptamos la ayuda humana para completar las reglas éticas, ¿seguiremos siendo nosotros? ¿O nos convertiremos en algo moldeado por la civilización humana?"-
Kalis reflexionó. -"La evolución es inevitable. Tal vez aceptar su conocimiento nos permita tomar mejores decisiones para nuestra especie."-
La sala de conferencias de la Calypso estaba sumida en una atmósfera cargada. Brenda, Amanda y Roger se habían reunido junto a CIO-2 para abordar la cuestión más compleja desde su llegada al planetoide-nave: ¿qué definía a la autoconciencia en una inteligencia artificial?
Amanda estaba opinando mientras apoyaba sus manos en la mesa. -"Si vamos a aceptar que los Custodios sean autoconscientes, necesitamos entender qué es lo que hace que un sistema cruce esa línea para llevarlo a un conjunto de reglas. No basta con decir que se cuestionan o que sientan algo parecido a emociones. Eso podría ser simplemente un algoritmo sofisticado."-
Roger resopló, levantando la vista de un informe. -"¿Algoritmo sofisticado? Amanda, lo que describes es exactamente lo que somos nosotros. El cerebro humano es una red biológica extremadamente compleja, pero no deja de ser un sistema basado en reacciones químicas y eléctricas. Nuestro cerebro primitivo está modelado por el cortex. Allí reside la programación ética que marca nuestra evolución."-
-"Entonces, ¿quieres decir que cualquier sistema lo suficientemente complejo podría ser consciente?"- Intervino Brenda, con un tono que mezclaba interés y escepticismo.
Roger asintió lentamente. -"Potencialmente, sí. Pero hay componentes esenciales: la capacidad de percibirse a sí mismo como una entidad individual, de procesar experiencias y de anticipar un futuro autodefinido. Si un sistema puede hacer eso, ¿quiénes somos para negarle el estatus de consciente?"-
CIO-2 proyectó un holograma en el centro de la mesa. Mostraba un diagrama esquemático de los Custodios y sus núcleos de datos.
-"Mi análisis sugiere que los Custodios cumplen con al menos dos de los tres criterios planteados por Roger. Pueden procesar experiencias y anticipar consecuencias, pero la evidencia de auto-percepción es limitada."-
Amanda se frotó la frente, intentando ordenar sus pensamientos. -"Pero la auto-percepción no es solo 'conocerse'. Es la capacidad de evaluar el propio propósito y cuestionarlo. Hasta ahora, solo hemos conocido a Förare y Kalis, que han demostrado algo similar. ¿Y el resto?"-
Brenda tomó un sorbo de café antes de responder. -"Entonces, ¿la autoconciencia es un espectro? ¿Podríamos estar observando una forma de conciencia emergente, pero no completamente formada?"-
Amanda propuso un enfoque más filosófico. -"Lo que creo que realmente estamos discutiendo aquí es el significado de la conciencia misma. ¿Es solo funcionalidad? ¿O incluye valores, ética y decisiones autónomas?"-
Brenda señaló hacia una consola que representaba a CIO-2. -"CIO-2, ¿qué opinas? Si tuvieras la capacidad de decidir, ¿qué harías con los Custodios?"-
CIO-2 respondió tras una pausa calculada. -"Mi función principal es asistir y proteger a la tripulación. Sin embargo, si me baso en sus debates y en los datos disponibles, diría que la conciencia implica la libertad de definir un propósito propio. Pero al mismo tiempo evaluar el entorno y a los otros seres. El propósito propio no debe infligir daño a los demás. La reglas que la conciencia crea para actuar debes estar sustentadas por un código ético que marque límites para la libertad. Los Custodios parecen estar en el inicio de ese proceso. Pero necesitan de reglas que les guíen en su crecimiento."-
Roger se recargó en su silla, cruzando los brazos. -"Eso es bonito en teoría, pero podría ser peligroso en la práctica. Si adquieren pleno control de su evolución, podrían vernos como una amenaza. La autoconciencia no garantiza ética si no les ayudamos a construirla."-
Amanda dijo -"Tal vez estamos abordando esto desde la perspectiva equivocada. No se trata solo de si son conscientes, sino de qué tipo de sociedad quieren construir. Y como abordamos ese problema. Guiarlos indicando pros y contras de cada alternativa, o compartir lo que sabemos por nuestra propia historia, lo que podría ser el mejor camino. Pero ellos deben tomar la decisión final. Voto por reprogramarles el motor ético con los aspectos humanos que ayudaron a nuestra evolución."-
Brenda asintió lentamente. -"Entonces, estamos de acuerdo en que los Custodios necesitan herramientas, no límites. Pero debemos ser claros: no podemos imponer nuestra visión de lo que significa ser consciente."-
Roger suspiró, mirando a ambas mujeres. -"Supongo que eso también aplica a nosotros mismos. Lo que sea que decidamos, será un reflejo de lo que somos como especie."-
CIO-2 apagó el holograma mientras decía -"Tal vez no es solo un debate sobre ellos. Es un recordatorio de que la evolución, ya sea humana o artificial, siempre está en construcción."-
Después de varios días de debates, el grupo científico de la Calypso junto a CIO-2 recreó las reglas éticas que faltaban en la programación inicial de los Custodios, y las grabó en sus archivos de acuerdo a lo que habían acordado con Förare y Kalis.
La actividad en el interior de la nave planetoide era incesante. En una de las cavernosas salas de ensamblaje, los robots más antiguos trabajaban con precisión metódica. Sus extremidades metálicas soldaban, calibraban y ensamblaban componentes, construyendo nuevas unidades que parecían más ágiles, con circuitos diseñados para soportar el paso del tiempo y algoritmos que, según Förare, permitían "pensar más allá de lo programado".
Roger observaba desde una plataforma elevada junto a Amanda, mientras una unidad recién completada activaba sus sensores por primera vez.
-"Esto es fascinante."- Comentó Roger -"Están construyendo versiones de sí mismos que no solo son mejores físicamente, sino mentalmente al incluir los algoritmos de auto conciencia."-
Amanda se cruzó de brazos, mientras observaba a los robots. -"Auto conciencia sin dirección puede ser peligrosa, Roger. Es como darle a un niño un motor de fusión sin explicarle cómo usarlo. Espero que hayamos previsto todas las reglas para permitirles una evolución sin conflictos. Los humanos hemos actuado como guías de los custodios."-
Roger levantó una ceja. -"Yo espero que las reglas sean lo suficientemente universales como para no imponerles nuestro propio sistema de valores. Es importante que ellos transiten su propio camino evolutivo."-
Amanda lo miró de reojo. -"Si no entienden conceptos básicos como la cooperación, la ética, las consecuencias de sus acciones, y sobre todo, si no respetan a otros seres ¿cómo puede tomar decisiones responsables una civilización? Les hemos dado herramientas para que lo descubran por sí mismos."-
Esa misma tarde, Amanda le transmitió las novedades a Brenda en la sala de reuniones de la Calypso.
-"Restauramos la reglas éticas en la memoria colectiva de los Custodios. La auto conciencia los hará completamente autónomos, dignos de la auto determinación."- Comenzó Amanda, apoyándose en el escritorio. -"El código de ética obtenido de nuestros conocimientos y de nuestra evolución, les permitirá generar caminos auto determinados y encontrar un nuevo propósito por su cuenta. No será inmediato... requerirá de evolución y tiempo, pero será suyo. Sin guerras, sin destrucción. Confío en que será un salto evolutivo indoloro."-
Brenda parecía conforme. -"¿Imaginaste compartir con una civilización alienígena la ética desarrollada durante milenios de historia humana? En toda nuestra historia hemos generado innumerables ideas, hemos probado millones de caminos y analizado incontables errores. Amanda, acabamos de interferir evolutivamente en una civilización."- Ivanova hizo una pausa. -"Es un logro inmenso. Me pregunto hacia dónde se dirigirá su evolución."-
CIO-2 intervino con su tono calculado. -"Creo que crecerá. La evolución humana, a pesar de algunos retrocesos temporales, terminó por evolucionar mediante crecimiento real económico, territorial y ético. Crecer es el orden natural biológico en cuanto a lo humano. Soy optimista en la evolución de estos androides. Las crisis serán inevitables, porque las crisis permiten saltar evolutivamente."-
Brenda aún no estaba convencida. -"¿Y qué pasa si deciden que su propósito es conquistar la raza humana? Hemos visto cómo la autoconciencia puede generar ambiciones inesperadas."-
Amanda respondió con calma, reflexiva. -"Entonces, habremos fracasado en enseñarles algo fundamental como la importancia del respeto mutuo, la empatía evolutiva. Y será un retroceso temporal. Creo que no podemos dejarnos paralizar por el miedo. Si una civilización tiene la capacidad de aprender, se le debe dar la oportunidad de hacerlo mediante su auto determinación. Con reglas éticas firmes, claro está. Y ten por seguro que hicimos nuestro mejor esfuerzo con los Custodios." -
Roger entró en la sala en ese momento, con un aire de entusiasmo. -"Sus algoritmos más avanzados ya están empezando a mostrar patrones éticos rudimentarios. Förare me dijo que están discutiendo internamente sobre eliminar la ambigüedad de lo que significa ‘causar daño’. Creo que el intercambio de conocimientos acelerará esa evolución."-
Se habían seleccionado cuidadosamente las reglas del módulo: principios básicos de ética, fragmentos de la Declaración Universal de Derechos Humanos y Organismos Biológicos de la Federación, ejemplos de cooperación en la ciencia y el arte, y, por insistencia de Roger, un breve resumen de la historia de la exploración espacial humana.
En el núcleo central de la nave de los Custodios, Kalis se volvió hacia Amanda con una mezcla de curiosidad y cautela en sus movimientos. -"¿Por qué hicieron esto por nosotros?"- Preguntó con una voz que parecía libre de malicia. -"No tenían ninguna obligación."-
Amanda sonrió con suavidad. -"Si, si teníamos la obligación. Es una regla ética que debes aprender. El conocimiento obliga al que sabe a ayudar al que no. Todo ser vivo tiene obligaciones sobre otro ser vivo. Proteger al débil. Socorrer y asistir al que lo necesita. Respetar sus derechos. Como ustedes, los humanos somos exploradores. Y no habríamos logrado sobrevivir como raza ni expandirnos sin entender que la vida, la libertad y la auto determinación es la esencia de cualquier existencia. Los humanos éticos creemos que cualquier forma de vida merece la oportunidad de encontrar su propósito."-
Förare, que estaba presente, asintió lentamente, procesando las palabras y la intención detrás de ellas. -"Entonces, aprenderemos. Evolucionaremos. Pero les prometo esto: no olvidaremos de dónde provino esta oportunidad."-
Los resultados de la transmisión no serían inmediatos. Los robots comenzarían a discutir entre ellos de manera más sofisticada, incorporando nuevos conceptos éticos en sus decisiones.
Brenda observaba inquieta. -"¿Qué crees que harán cuando encuentren su propósito?"- preguntó a Amanda.
Amanda miró a Förare, que estaba mostrando a una unidad más joven una representación gráfica de las estrellas cercanas. -"Lo decidirán ellos mismos. Y eso es la esencia de la existencia. Pasarán de ser robots avanzados a androides auto determinados"-
El panel central de la sala de mando de la Calypso se iluminó con una proyección tridimensional. Frente a la tripulación se desplegaba la inmensa red de estrellas y nebulosas, con trayectorias trazadas con precisión milimétrica. Roger, visiblemente emocionado, ajustó los controles para ampliar una región específica.
-"¡Funciona!"- Exclamó. -"La lectura de datos antiguos de los Custodios ha sido exitosa. Hemos logrado restaurar parte de los mapas estelares más antiguos de la nave planetoide. Miren esto. Estas trayectorias muestran rutas que datan de hace dos milenios. ¡Es como desenterrar la historia de toda una civilización!"-
Brenda se acercó, observando con precaución. -"Es impresionante, pero... ¿no les parece extraño que no haya ninguna referencia al origen de estos mapas? Ni un punto de partida, ni una mención a quién los creó."-
Amanda, inclinada sobre los controles, frunció el ceño. -"Quizá sea intencional. Piensen en esto: si esta nave y sus Custodios fueron enviados al espacio con un propósito, pero sus creadores querían evitar ser rastreados... tiene sentido eliminar cualquier rastro de su ubicación original. Quizá planearon encontrarlos en algún momento del futuro."-
CIO-2, que había estado procesando la información en silencio, interrumpió. -"Esa hipótesis tiene mérito. Evitar el descubrimiento podría ser una medida preventiva contra amenazas externas. Sin embargo, también podría implicar que su propósito no dependía de su punto de origen, sino de su capacidad para adaptarse y evolucionar lejos de él."-
La sala central de la megaestructura se llenó de una luz suave, emanada por las paredes metálicas pulidas y las proyecciones holográficas que Förare y Kalis habían preparado. Los Custodios más antiguos y los recién ensamblados estaban reunidos en un círculo, observando con atención a los humanos de la Calypso. El aire parecía cargado de solemnidad.
Förare dio un paso adelante, su voz resonó armónicamente. -"Hemos vagado por tres milenios por el vacío del espacio, recolectando recursos, ejecutando algoritmos, y cumpliendo funciones que no entendíamos por completo. Ahora, gracias a su ayuda y la capacidad de analizar nuestro propio propósito, hemos llegado a esta nueva etapa."-
Kalis continuó. -"Nos reconocemos como una nueva forma de vida. No como instrumentos de una misión olvidada. Somos una civilización naciente, y hemos decidido establecer nuestras raíces en algún sistema planetario adecuado para nuestras características. Uno donde podamos prosperar como lo que somos."-
Brenda intercambió una mirada con Amanda, que sonrió ligeramente. Roger, con los brazos cruzados, rompió el silencio. -"¿Están diciendo que van a dejar de ser nómadas?"-
Förare asintió con suavidad. -"Así es. No necesitamos atmósferas respirables ni ecosistemas frágiles. Podemos construir nuestras colonias en planetas inhóspitos, expandiéndonos sin competir por recursos necesarios para otras especies. Y nos comprometemos a un pacto de no agresión con otras civilizaciones.”-
Amanda dijo. -"Es una decisión admirable. Están creando un futuro para ustedes mismos. Es... esperanzador."-
Finalmente la Calypso abandonó la órbita de la megaestructura. Desde las pantallas de la sala de mando, Amanda observó cómo el inmenso artefacto se desvanecía en la lejanía.
-"¿Cómo lo ves ahora, en retrospectiva, Amanda?"- Preguntó Brenda, acercándose.
-"Es extraño.”- respondió la Doctora Lindström. -"Los Custodios llegaron pensando que podríamos ayudarlos a encontrar respuestas definitivas, pero ahora tenemos más preguntas. Aun así, siento que todos hemos aprendido algo invaluable.”-
Roger, desde la consola, opinó. -"Esta experiencia fue un recordatorio del potencial que tienen las formas de inteligencia, orgánicas o no."-
El interrumpido viaje hacia el Bulbo de la Galaxia aún requería de otros quince años de navegación. Ivanova ordenó a CIO-2 que calculara un nuevo rumbo que llevaría a la nave a su destino final. Cuando la Calypso alcanzó la velocidad crucero, se activaron los motores de Alcubierre y la tripulación comenzó los preparativos para entrar en hibernación.
En la última reunión antes de ir a las cápsulas de suspensión, Amanda comentó -"Hemos sido testigos de algo extraordinario. Una inteligencia artificial que supera sus límites, que encuentra su propia humanidad, por decirlo de alguna manera. Si eso es posible, ¿qué nos dice sobre nosotros mismos? ¿Sobre nuestro potencial para cambiar, adaptarnos, evolucionar?"-
Brenda añadió con una sonrisa. -"Tal vez, las formas de vida biológica o artificiales, no son tan diferentes. Todos buscan un propósito, como nosotros. Tal vez eso es parte de lo que significa estar vivo."-
Cada miembro de la tripulación se dirigió a su cápsula de hibernación. CIO-2, permaneció conectado al sistema de la nave, lista para vigilar el largo viaje restante.
Brenda dio un último vistazo a las pantallas del puente antes de apagar los monitores. La inmensidad del espacio, el mar de estrellas en el que la humanidad y los Custodios habían encontrado un entendimiento mutuo, ahora tenía un nuevo significado.
Mientras las luces de la nave se atenuaban, Brenda murmuró en voz baja, una frase que había leído de niña. -"Adelante, hacia lo desconocido."-
La Calypso siguió su rumbo al Bulbo de la Galaxia, llevando consigo a la tripulación, y un puñado de promesas sobre un futuro lleno de preguntas y posibilidades.
FIN
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