Conversaciones Imposibles
Sexo, algoritmos y vacaciones
La reunión fué en el living de casa. Una mesa baja con algunas cajas de pizza abiertas y otras esperando el turno. La juntada había sido espontánea y esperábamos a un par más de amigos. Teníamos algunas botellas de cerveza, vasos con Coca y servilletas hechas bolita. Rastro de que el hambre no había podido esperar por el resto de los invitados.
Con Juana y Marcia estábamos cerca de la estufa, en ese rito invernal de los menducos, en donde les gusta incrustar el poto sobre las estufas. Había puesto música suave de fondo y nos reíamos por las conversaciones tontas que se nos ocurrían.
Yo estaba con media porción de fugazzeta en la mano -"A ver si alguien me explica por qué puedo pasar seis meses escribiendo una novela de ciencia ficción... ¡y nadie la compra! Pero subís un cuento con una escena erótica entre una bibliotecaria y un despachante de comida, ¡y te llueven los corazones y los euros!"-
Juana Kafka estaba tomando un sorbo de su cerveza -"Rodriac, amor, estamos en un mundo donde lo sensual tiene más engagement que la reflexión. Tal vez necesitás menos Verne y más... vértigo. Y senos."- rodeó su busto con los brazos y apretó suave pero con intención, mientras se reía -"Muchos senos."-
Me reí por el gesto pícaro -"Sos mi próxima portada, Juana. Ventas seguras, sin dudas."-
Marcia del Futuro (le decimos así por lo adelantada), se rió mientras acomodaba su bufanda como si fuera una capa -"¡Ay, sí! Lo he pensado mil veces. Si en lugar de "Crónicas de la Última Nebulosa" a mi libro le hubiera puesto “Sexo Estelar con el Príncipe Multiorgásmico”, ¡lo vendía como pan caliente!"-
Riéndome, simulé una voz profunda de narrador -"El amor llegó desde Orión... con tres porongas de silicona intercambiables.”-
Hice un silencio dramático, mientras las chicas se reían de buena gana.
Sonó el portero. Fui a buscar los invitados. Entró Charlie Tangente, sacudiéndose el abrigo y hablando ya desde la puerta. -"¿Hay pizza o ya se comieron hasta la caja, manga de literatos degenerados? ¡Uh, cómo está el frío, che! ¡Ni el motor del 504 calienta hoy!"-
Juana se rió con gusto. Le cae muy bien mi amigo Charlie -"Hola, Charlie. Siempre tan... ¿acelerado?"-
Charlie respondió rápido, fiel a su estilo Colapinto de F1. Rápido... pero a veces no tan eficaz. -"¡Apa! ¿Otra vez estás aquí, Kafkita? Bueno, che, vengo justo de llevar a una señora al Carrefour, ¡Me contó que gana una fortuna vendiendo boludeces por TokTok! Me dijo que se hacía llamar SoledadMil"-
Marcia dio un gritito entusiasmada -"¡Yo la conozco! Es una genia. Hace entregas discretas en cajas de cartón sin logos. Parece que te está mandando un matafuego. Y vos lo abrís y... ¡boom! Vibrador galáctico con bluetooth."-
Nos reímos todos por el comentario.
Yo dije -"Ahí tenés. Mientras uno escribe cuentos con metáforas existenciales, otros hacen fortuna con... silicona USB."-
Volvió a sonar el portero. Era Lucy Moonwick, nuestra tarotista de cabecera, con una túnica estilo boho chic, bufanda plateada y una bolsita con piedritas. Dijo -"¡Hola mis astros errantes! Traje cuarzos para alinear el espíritu de la pizza. ¿De qué hablábamos?"-
Charlie respondió mientras se sentaba en el sillón con una porción de especial y fainá -"De erotismo, algoritmos y consuelos eléctricos."-
Lucy abrió los ojos -"Ah, buenísimo... empezamos livianita la charla ¿Ya notaron que TikTok sugiere cosas sin buscar nada? ¡Me parece que el horóscopo lo escribe un bot que me escucha por el teléfono en el baño!"-
Como Lucy es nuestra referente en temas esotéricos, Marcia le preguntó -"Lucy, ¿Y si los signos ya no dependen de tu fecha de nacimiento, sino de tu historial de búsqueda? ¿Los horóscopos actuales son hechos por inteligencia artificial?"-
Juana dijo -"La IA quita trabajo a todos. Imaginate: 'Hoy, Venus está en tu lista de deseos. Probabilidades de fortuna 87%. No confíes en Escorpio, porque vio tus mensajes archivados.”-
Lucy se rió de la ocurrencia -"¡Exacto! Yo le tiré las cartas a una influencer y salió “El Colgado”, “El Diablo” y “Plan de datos agotado”. ¡Fue místico y claro!"-
Me serví más Coca mientras dije -"Estamos atrapados en una Matrix con delivery sexual, predicciones algorítmicas y lectores que solo quieren leer sobre naves húmedas y cuerpos perfectos. ¿Para cuándo el Nobel a la ciencia ficción humorística?"-
Charlie brindó -"Cuando Messi juegue para San Martín de Mendoza. Falta poco, ya está casi para el retiro"-
Hubo risas mientras cambiábamos de tema.
Marcia preguntó -"Che, ¿qué van a hacer en las vacaciones de invierno? Porque no se consigue ni una cabaña para ir a Potrerillos. ¡Está todo lleno de mamás con crías!"-
Juana tiro un bocadillo entre porciones de pizza -"Y abuelos. Como Charlie, que va con los nietos a pisar barro en Cacheuta."-
Carlie respondió -"¡Obvio! Ellos se mojan las medias y yo termino con la ciática activada. Vacaciones familiares, mi gente."-
Lucy dijo -"Yo me voy a San Rafael a alinear los chakras en el cañón del Atuel. Me dijeron que la energía del río te baja el ego."-
Dije desesperanzado -"Si me quedo en casa escribiendo para vender, tendré que pensar algún tema comercial"-
Juana me miró con una ceja levantada -"Solito no te voy a dejar. Y si no vendés, siempre quedo yo para leértelos en voz alta."-
Todos hicieron “uhhhhh” mientras se reían. La velada estaba terminando. Se pusieron de pie para abrigarse.
Charlie dijo -"¡Querés que te acerque, Juana?"-
Juana respondió -"No, gracias. Está muy frío allá afuera. Mejor me quedo y paso la noche. Me invitaron a café y chocolate... ¿cómo decir que no?"-
Marcia miró por la ventana y dijo -"¡Ay, qué luna llena más intensa está saliendo hoy!"-
Lucy abrió los ojos graciosamente mientras nos miraba a Juana y a mi para decir -"Mmmm.. ustedes dos están a punto de alinearse con Saturno, me parece."-
Se despidieron entre risas, besos y promesas de una próxima juntada. Con Juana nos fuimos a la cocina.
Puse agua para el café. Juana se acercó y se sentó con una manta sobre los hombros. Dijo -"¿Sabés una cosa, Rodri?"-
-"¿Sí?"-
Juana se puso filosófica -"Al final... no sé si podremos vender libros. Pero las reuniones como esta... vale la pena escribirlas."-
Respondí mientras le pasaba el café con un chocolate -"Y publicarlas como 'Comedia de confesiones nocturnas'"-
Juana sonrió -"Título largo. Pero honesto."-
En un mundo donde los algoritmos predicen tus deseos antes de que los pienses, donde los escritores luchamos por cada lector y los vibradores tienen más fans que los libros... lo único que sigue valiendo más que un click es una buena charla con gente que te quiere. Y si hay pizza... mejor.
FIN
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